Durante la jornada del pasado lunes, detectives de la Brigada Investigadora de Robos Calama (BIRO) tras una serie de diligencias, lograron recuperar una serie de celulares sustraídos avaluados en más de 4 millones y medio de pesos. Ante esto, la BIRO a través de una orden del Ministerio Público abordaron y revisaron distintos locales de ventas y reparación de estos aparatos ubicados en el centro de Calama. Asimismo, en base a la investigación realizada por personal policial se detectó que uno de los locales tendría directa relación con los hechos investigados, encontrando cinco teléfonos marca Apple modelos 14 y 15 PRO Max sin guías de trabajo y con orden de encargo por robo. Dado lo anterior, el jefe de la unidad, Subprefecto Esteban Sessarego detalló que continúan las diligencias investigativas para determinar las distintas variables del delito. Finalmente, una persona quedó detenida a quien se le imputa el delito de Receptación Flagrante y el pasado lunes fue puesta a disposición de la justicia.
Este jueves, el Senado de Brasil aprobó la ley que prohíbe el uso de celulares en los colegios de primaria y secundaria, medida que afectará a estudiantes entre 4 y 17 años. La normativa, respaldada por el 82% de los padres brasileños, establece que los dispositivos estarán prohibidos en todo momento, aunque permite su uso excepcional para fines pedagógicos. Según el texto, para “salvaguardar la salud mental, física y psíquica de los niños y adolescentes”, los celulares quedarán prohibidos en las escuelas, tanto en las aulas como en los momentos de recreo. La norma permite excepcionalmente el uso de aparatos electrónicos que busquen alcanzar mayor porcentaje de accesibilidad en ciertas zonas periféricas del país. Sumado a lo anterior, los recintos educativos también deberán crear estrategias para abordar los problemas en la salud mental asociados al uso de estos dispositivos, debido a las alarmantes cifras entregadas por profesionales del rubro. En tanto, el ministro de Educación, Camilo Santana, se ha mostrado a favor de poner un “límite” a los aparatos celulares en las escuelas. “Las experiencias en el mundo entero han mostrado el prejuicio en un déficit de atención por el uso de aparatos celulares dentro de las aulas”, dijo el personero de Estado a la prensa en noviembre pasado. “El celular acabó con la socialización de las personas. Hace falta un límite”, fustigó el titular de la cartera. En este mismo sentido, un informe de la Unesco afirma que: “Prohibir los teléfonos móviles en los colegios mejora el rendimiento académico, especialmente en el caso del alumnado con bajo rendimiento”. Sin embargo, advierte que la medida podría ponerlos en desventaja. Ahora la ley debe ser autorizada por Lula da Silva. Este paso marcará un avance significativo en los esfuerzos por salvaguardar la salud mental, física y psíquica de niños y adolescentes, refrenda el documento legal.
Durante la jornada del pasado lunes, detectives de la Brigada Investigadora de Robos Calama (BIRO) tras una serie de diligencias, lograron recuperar una serie de celulares sustraídos avaluados en más de 4 millones y medio de pesos. Ante esto, la BIRO a través de una orden del Ministerio Público abordaron y revisaron distintos locales de ventas y reparación de estos aparatos ubicados en el centro de Calama. Asimismo, en base a la investigación realizada por personal policial se detectó que uno de los locales tendría directa relación con los hechos investigados, encontrando cinco teléfonos marca Apple modelos 14 y 15 PRO Max sin guías de trabajo y con orden de encargo por robo. Dado lo anterior, el jefe de la unidad, Subprefecto Esteban Sessarego detalló que continúan las diligencias investigativas para determinar las distintas variables del delito. Finalmente, una persona quedó detenida a quien se le imputa el delito de Receptación Flagrante y el pasado lunes fue puesta a disposición de la justicia.
Este jueves, el Senado de Brasil aprobó la ley que prohíbe el uso de celulares en los colegios de primaria y secundaria, medida que afectará a estudiantes entre 4 y 17 años. La normativa, respaldada por el 82% de los padres brasileños, establece que los dispositivos estarán prohibidos en todo momento, aunque permite su uso excepcional para fines pedagógicos. Según el texto, para “salvaguardar la salud mental, física y psíquica de los niños y adolescentes”, los celulares quedarán prohibidos en las escuelas, tanto en las aulas como en los momentos de recreo. La norma permite excepcionalmente el uso de aparatos electrónicos que busquen alcanzar mayor porcentaje de accesibilidad en ciertas zonas periféricas del país. Sumado a lo anterior, los recintos educativos también deberán crear estrategias para abordar los problemas en la salud mental asociados al uso de estos dispositivos, debido a las alarmantes cifras entregadas por profesionales del rubro. En tanto, el ministro de Educación, Camilo Santana, se ha mostrado a favor de poner un “límite” a los aparatos celulares en las escuelas. “Las experiencias en el mundo entero han mostrado el prejuicio en un déficit de atención por el uso de aparatos celulares dentro de las aulas”, dijo el personero de Estado a la prensa en noviembre pasado. “El celular acabó con la socialización de las personas. Hace falta un límite”, fustigó el titular de la cartera. En este mismo sentido, un informe de la Unesco afirma que: “Prohibir los teléfonos móviles en los colegios mejora el rendimiento académico, especialmente en el caso del alumnado con bajo rendimiento”. Sin embargo, advierte que la medida podría ponerlos en desventaja. Ahora la ley debe ser autorizada por Lula da Silva. Este paso marcará un avance significativo en los esfuerzos por salvaguardar la salud mental, física y psíquica de niños y adolescentes, refrenda el documento legal.