La tarde de este miércoles, el embajador chileno en Estados Unidos (EE.UU.), Juan Gabriel Valdés, se refirió a la llegada de Donald Trump a la presidencia junto a las eventuales repercusiones que ello podría traer para la relación entre ambos países. En primera instancia, el diplomático aseguró que el cambio de mando en suelo norteamericano no implica ninguna modificación en la diplomacia entre las dos naciones, pese al cuestionamiento sobre la extensión del programa Visa Waiver a los ciudadanos chilenos. En ese contexto, señaló que “esa gente le causa un daño a la mayoría de la población chilena que usa el Visa Waiver de manera correcta”, sostuvo en conversación con La Tercera. Si con el gobierno de Trump se toma la decisión de suspender la Visa Waiver -porque existen bandas de criminales chilenos dando vuelta-, no es algo que tenga que ver con responsabilidades propias de este gobierno o de la autoridad chilena o norteamericana, porque ellos han trabajado en perfecta armonía, aseveró. Cabe recordar que este último mes, giró la polémica en torno a la Visa Waiver y a la posibilidad de que EE. UU. suspenda el beneficio, a raíz de las distintas bandas criminales formadas por chilenos que han sido desarticuladas en el país norteamericano. Con un país con el que se tienen 200 años de relación diplomática no se tienen relaciones dependiendo de los gobiernos, se tienen relaciones de Estado, acotó. En esta misma línea, hizo hincapié en que es una relación de gran importancia para Chile y no vemos razones para que lo bueno de nuestra relación cambie de ninguna manera. Con todo, Valdés también abordó los dichos del magnate sobre Latinoamérica, donde aseguró que Estados Unidos no la necesita. En ese sentido, apuntó que es una frase que habrá que estudiar cómo la piensa mirar, porque naturalmente mucho de lo que él dice no es algo que nosotros hayamos escuchado del canciller recién nombrado, Marco Rubio , que en el pasado ha expresado de manera muy clara su voluntad de asociación con América Latina, cerró.
Fue durante la mañana de este martes, que el Gobierno a través del Ministerio de Relaciones Exteriores decidió poner fin a la misión del embajador chileno en Venezuela, Jaime Gazmuri, como consecuencia de la ruptura diplomática tras las elecciones del país caribeño en julio pasado. En un comunicado, desde La Moneda sostuvieron que “ esta medida responde a la evolución de los hechos a partir de las elecciones presidenciales del 28 de julio de 2024 en Venezuela, tras las cuales Nicolás Maduro ha asegurado que seguirá siendo el Presidente de ese país desde el 10 de enero, como resultado del fraude electoral perpetrado por su régimen ”. La decisión de Chile se produce en un marco de creciente tensión, después de que en agosto del año pasado el personal diplomático chileno fuera expulsado de Caracas. Lo anterior, luego de que Gabriel Boric decidiera no reconocer los resultados de los comicios en los que Maduro aseguró su reelección. Chile espera que Venezuela pueda retomar la senda de la democracia y de la promoción y protección de los derechos humanos, valores que hoy se encuentran ausentes en ese hermano país, indicó el documento. Vale recordar, que el diplomático nacional había sido designado en mayo de 2023, luego de cinco años sin un embajador chileno en Caracas. Su nombramiento buscaba fortalecer el diálogo bilateral y abordar la crisis migratoria venezolana. No obstante, a 19 meses de esa decisión, Boric optó por volver al esquema implementado durante el gobierno de Sebastián Piñera, que operaba con un encargado de negocios como la figura principal de contacto con el régimen de Nicolás Maduro. Por su parte, el retorno de Gazmuri a Chile estuvo marcado por polémicas, ya que continuó recibiendo su sueldo de embajador pese a no ejercer funciones en Venezuela. Este hecho generó críticas hacia la Cancillería, que tuvo que justificar el pago.
La tarde de este miércoles, el embajador chileno en Estados Unidos (EE.UU.), Juan Gabriel Valdés, se refirió a la llegada de Donald Trump a la presidencia junto a las eventuales repercusiones que ello podría traer para la relación entre ambos países. En primera instancia, el diplomático aseguró que el cambio de mando en suelo norteamericano no implica ninguna modificación en la diplomacia entre las dos naciones, pese al cuestionamiento sobre la extensión del programa Visa Waiver a los ciudadanos chilenos. En ese contexto, señaló que “esa gente le causa un daño a la mayoría de la población chilena que usa el Visa Waiver de manera correcta”, sostuvo en conversación con La Tercera. Si con el gobierno de Trump se toma la decisión de suspender la Visa Waiver -porque existen bandas de criminales chilenos dando vuelta-, no es algo que tenga que ver con responsabilidades propias de este gobierno o de la autoridad chilena o norteamericana, porque ellos han trabajado en perfecta armonía, aseveró. Cabe recordar que este último mes, giró la polémica en torno a la Visa Waiver y a la posibilidad de que EE. UU. suspenda el beneficio, a raíz de las distintas bandas criminales formadas por chilenos que han sido desarticuladas en el país norteamericano. Con un país con el que se tienen 200 años de relación diplomática no se tienen relaciones dependiendo de los gobiernos, se tienen relaciones de Estado, acotó. En esta misma línea, hizo hincapié en que es una relación de gran importancia para Chile y no vemos razones para que lo bueno de nuestra relación cambie de ninguna manera. Con todo, Valdés también abordó los dichos del magnate sobre Latinoamérica, donde aseguró que Estados Unidos no la necesita. En ese sentido, apuntó que es una frase que habrá que estudiar cómo la piensa mirar, porque naturalmente mucho de lo que él dice no es algo que nosotros hayamos escuchado del canciller recién nombrado, Marco Rubio , que en el pasado ha expresado de manera muy clara su voluntad de asociación con América Latina, cerró.
Fue durante la mañana de este martes, que el Gobierno a través del Ministerio de Relaciones Exteriores decidió poner fin a la misión del embajador chileno en Venezuela, Jaime Gazmuri, como consecuencia de la ruptura diplomática tras las elecciones del país caribeño en julio pasado. En un comunicado, desde La Moneda sostuvieron que “ esta medida responde a la evolución de los hechos a partir de las elecciones presidenciales del 28 de julio de 2024 en Venezuela, tras las cuales Nicolás Maduro ha asegurado que seguirá siendo el Presidente de ese país desde el 10 de enero, como resultado del fraude electoral perpetrado por su régimen ”. La decisión de Chile se produce en un marco de creciente tensión, después de que en agosto del año pasado el personal diplomático chileno fuera expulsado de Caracas. Lo anterior, luego de que Gabriel Boric decidiera no reconocer los resultados de los comicios en los que Maduro aseguró su reelección. Chile espera que Venezuela pueda retomar la senda de la democracia y de la promoción y protección de los derechos humanos, valores que hoy se encuentran ausentes en ese hermano país, indicó el documento. Vale recordar, que el diplomático nacional había sido designado en mayo de 2023, luego de cinco años sin un embajador chileno en Caracas. Su nombramiento buscaba fortalecer el diálogo bilateral y abordar la crisis migratoria venezolana. No obstante, a 19 meses de esa decisión, Boric optó por volver al esquema implementado durante el gobierno de Sebastián Piñera, que operaba con un encargado de negocios como la figura principal de contacto con el régimen de Nicolás Maduro. Por su parte, el retorno de Gazmuri a Chile estuvo marcado por polémicas, ya que continuó recibiendo su sueldo de embajador pese a no ejercer funciones en Venezuela. Este hecho generó críticas hacia la Cancillería, que tuvo que justificar el pago.